ERRORES AL NO ACEPTAR LA RENUNCIA PURA Y SIMPLE O CON CAUSA ATRIBUIBLE AL EMPLEADOR
En ocasiones, las empresas cometen el yerro de no aceptar la renuncia de un trabajador cuando son puras y simples o con causas atribuibles al empleador con el pensamiento de no ser necesario por no ser una obligación de la empresa, sin embargo, la H. Corte Suprema de Justicia sala laboral, en sentencia SL 16281 radicado n.°53675 de 27 de septiembre de 2017 nos da un claro ejemplo de porque esto puede ser un error.
¿QUÉ SUCEDIÓ?
Un trabajador con vínculo laboral en una empresa, decidió renunciar de manera pura y simple con el objetivo de dar terminación a su vínculo laboral con la compañía, sin embargo, la misma, permitió al trabajador seguir laborando, negándole su renuncia, lo que conllevó a que el contrato siguiera vigente. Posteriormente el trabajador decidió renunciar de nuevo pero esta vez no lo realizó de forma pura y simple sino que por el contrario motivó la misma, generándose entonces la figura del despido indirecto, en consecuencia la empresa aceptó la primera renuncia del trabajador sin hacer mención de la segunda, efectuando así, que las causales enunciadas en la última renuncia presentada por el ex trabajador fueran ciertas.
El anterior caso fue llevado a demanda por el trabajador con el fin de obtener la indemnización que trata el artículo 64 del C.S.T, señalando la H. Corte Suprema de Justicia sala laboral, que la segunda renuncia era plenamente válida y que sin existir pronunciamiento del ex empleador, se entiende probadas las causas invocadas por el ex trabajador para dar por terminado el contrato de trabajo.
SUGERENCIA
Según lo visto en esta sentencia, se les sugiere a las empresas que en momento de una renuncia pura y simple o tenga causa atribuible al empleador se debe aceptar la misma para así evitar problemas hacia futuro con el trabajador que ha decidió terminar unilateralmente el vínculo de manera definitiva.
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